Diego Torres reflexiona: “El camino hacia la felicidad implica atravesar momentos de sufrimiento”.

Diego Torres reflexiona: “El camino hacia la felicidad implica atravesar momentos de sufrimiento”.

“Mejor que ayer” es el título del nuevo álbum de Diego Torres, el décimo en una carrera musical que abarca más de 30 años y que ha cosechado éxitos en todo el mundo. En una charla exclusiva con el artista argentino, uno de los máximos exponentes del pop latino, discutimos sobre la etapa actual que atraviesa y las raíces familiares que lo unen a España.

Diego Torres (Buenos Aires, 53 años) está de visita en España para presentar su nuevo álbum “Mejor que ayer”, un proyecto en el que ha invertido dos años en escribir y producir. Este disco, según él, está “lleno de colores”, donde cada canción crea su propio universo.

Nos encontramos con el artista a primera hora del martes en un hotel céntrico de Gran Vía, elegido como su base para estos días frenéticos de promoción en Madrid. Se le ve contento; España es parte de sus raíces.

“Este álbum contiene todo lo que reside en mi ser”.

“Las letras que componen este álbum encapsulan más de un mensaje. Son una amalgama de emociones, experiencias y recuerdos que prefiero no definir, ya que me gustaría que cada persona hiciera su propia interpretación”, expresa el artista. “Este álbum abarca la melancolía, lo sentimental, la alegría, el espíritu guerrero… Contiene todo lo que reside en mí”, continúa, refiriéndose a su proceso creativo.

En esta última etapa, ha experimentado una montaña rusa de emociones. En 2021, su matrimonio con Débora Bello llegó a su fin después de 17 años. Siguiendo el estereotipo argentino, se reconoce como alguien que sufre, encontrando consuelo en el tango: “Nosotros, si no sufrimos, es que algo no va bien… Hay que saber sufrir para saber amar, y eso es lo que refleja el disco, cómo transitamos por esta vida”.

“Mi madre me educó con música española”.

“En el primer tema, ‘Leyes de la Vida’, mis sobrinos Benja y Ángela Torres colaboran conmigo. La canción trata sobre valorar las cosas a tiempo, recordar cuando teníamos a la abuela, a papá, a mamá, los amigos, la infancia, las calles que nos marcaron… Y tiene que ver con España, con mi experiencia personal. Mi madre era cantante y me crié con música española, con la rumba, el cajón, la guitarra… Mi madre incluso grabó con Los Habichuela, que eran los padres de los Ketama, y luego terminé grabando con ellos”, rememora. “La música siempre ha sido un puente para mí, y lo que busco es ese vínculo entre Madrid, Buenos Aires, Centroamérica… Ese triángulo que me apasiona y me define como persona”.

Diego Torres es el menor de los cinco hijos de Lolita Torres, una reconocida actriz y cantante argentina que popularizó la copla española en Buenos Aires. Su voz resonó en temas tan conocidos como “Te lo Juro Yo” o “La Niña de Fuego”, que también fue el título de una de las 20 películas que protagonizó.

Aunque Lolita falleció en 2002, su legado perdura a través de Diego, y él espera transmitirlo a su hija Nina, de once años, si un día ella le dice: “Papá, quiero ser artista”. “Le diría lo mismo que mi mamá me dijo a mí. Ella tenía una mirada kung fu, hablaba con pocas palabras. Me dijo ‘andá y cantá’, y en ese ‘andá’ estaba el ensayar, el trabajar, el ‘te van a pasar cosas buenas, cosas malas’. En definitiva, ‘a ver cuán fuerte es tu vocación para atravesar chubascos y días de sol'”.

Después de 30 años sobre los escenarios, con diez álbumes a sus espaldas y dos premios Latin Grammy, pocos éxitos le quedan por superar. Carlos Vives, amigo personal y rey del vallenato, lo acompaña en “Kapun”, un tema tan vitalista como aquel inolvidable “Color Esperanza” que en 2001 hizo que el planeta entero cambiara su mirada para verlo todo de otro color. Han pasado más de dos décadas y su nuevo disco continúa esa estela que anima a vivir sin miedo. Ahora canta que “rendirse no es una opción”.

 

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