“Desde su primera aparición en la academia de Operación Triunfo en 2017, Aitana ha evolucionado hasta convertirse en una de las figuras más influyentes para el público joven. No solo sus seguidores se identifican con sus letras, sino que su trayectoria y desarrollo profesional representan tanto una aspiración como una inspiración para ellos.
Cada paso que da se interpreta como una declaración de intenciones. Así, su discurso este lunes por la noche en los premios Harper’s Bazaar, donde fue reconocida en la categoría de música por su contribución tanto en el escenario como fuera de él, adquiere un peso especial: el de alzar la voz en el contexto actual, un momento en el que los casos de abusos y violencia de género emergen cada vez más.
“Es imposible tener una vida perfecta”.
Al subir al estrado, Aitana comenzó reflexionando sobre su situación personal y confesando que atraviesa un periodo difícil a nivel emocional.
“Es imposible una vida perfecta, y quienes muchas veces somos referentes para los jóvenes, especialmente las mujeres, tenemos la responsabilidad de ser un ejemplo positivo para ellas. Pero a veces, nuestras mejores intenciones pueden volverse en nuestra contra, o peor aún, en contra de quienes nos siguen”, comentó, aludiendo a la vulnerabilidad que surge cuando la salud mental se resiente.
“Estoy muy feliz por este reconocimiento a mi música, por todo lo que me rodea. Estoy profundamente agradecida por la vida que tengo y, sobre todo, por las personas que me apoyan. Eso no significa que muchas veces no me sienta triste. En estos últimos meses, he pasado y sigo pasando por un bajón emocional que, desde fuera, puede parecer inexplicable porque tengo todo, y es cierto. Pero las personas no somos lo que poseemos, sino lo que vivimos, lo que nos afecta y cómo respondemos a ello”, confesó, visiblemente emocionada.”
“La cantante admitió que la presión mediática y la carga emocional de su día a día no facilitan que las cosas fluyan con normalidad, convirtiéndose en verdaderos retos, como si fueran ‘una pequeña montaña que, en ocasiones, es difícil de escalar’. Sin embargo, Aitana tiene claro que levantar la voz y compartir su realidad es fundamental para mejorar y seguir adelante, ‘porque la salud mental es tan importante como la física’.
Contra la violencia machista: ‘Todas las heridas deben sanar’
Comprometida con la realidad que afecta a las mujeres y la violencia que sigue surgiendo hacia ellas, la artista aprovechó para cerrar su discurso con palabras firmes contra el machismo y la misoginia, las cuales describió como ‘una plaga’.
‘Y claro, ¿cómo no estar triste? ¿Cómo no vamos a sentirnos así cuando basta ver lo que ha salido estos días en los medios? Casos evidentes en los que la vergüenza que sentimos las mujeres nos impide expresar el dolor que llevamos o que hemos sentido. Heridas que nos han infligido otros, pero también ciertas circunstancias que nos sobrepasan, perpetuando comportamientos tóxicos, dañinos y repulsivos. Solo quiero decir que todas las heridas deben sanar, tanto las visibles como las invisibles. Es importante contar lo que te pasa y por qué, sea hoy, ayer o hace tres años. Y, sobre todo, no debemos temer decir quién o qué nos ha causado dolor. No ocultemos nuestro sufrimiento cuando es invisible, como a veces nos han enseñado, porque las heridas no tratadas solo empeoran, se infectan, y finalmente nos afectan aún más. Creo que compartirlo es lo más responsable y eficaz para terminar con esta plaga’.”
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