La travesía a pie de Enol: “En esta ocasión, Asturias no será el punto de partida, sino el destino final”

La travesía a pie de Enol: “En esta ocasión, Asturias no será el punto de partida, sino el destino final”

Enol lleva cuatro años viviendo en Madrid, ciudad a la que se trasladó con un objetivo claro: cumplir su sueño de convertirse en cantante. Ahora, el artista emprende su regreso a casa, Asturias, de una forma única y emotiva: recorriendo a pie los 467 kilómetros que lo separan de su tierra natal.

Enol convierte su regreso a Gijón en un reto personal: 467 kilómetros a pie desde Madrid

¿Se puede ir caminando desde Madrid hasta Asturias? El cantante Enol está demostrando que sí, y que además puede convertirse en una travesía tan significativa como un camino de Santiago personal.

Aunque hace años que se mudó a Madrid para abrirse paso en el mundo de la música, Enol nunca ha dejado de llevar a Gijón en el corazón. Ahora ha querido rendir homenaje a su tierra natal de la forma más especial: recorriendo a pie los 467 kilómetros que separan la capital de Asturias.

A través de sus redes sociales, el artista asturiano está documentando esta aventura emocional bajo el lema: “467 kilómetros a pie de vuelta a casa”. Este largo camino no solo representa una distancia física, sino también el peso emocional de estar lejos del hogar, y una manera simbólica de reconectar con sus raíces.

Desde su salida el pasado sábado 10 de mayo desde la emblemática Puerta del Sol en Madrid, el intérprete de Santorini está compartiendo cada paso de esta experiencia transformadora. Para él, este trayecto es mucho más que un viaje: es una forma de resignificar el número que tanto odia —467—, convirtiéndolo en símbolo de orgullo, esfuerzo y amor por su tierra.

 

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Durante el primer día de su travesía a pie de Madrid a Asturias, Enol logró llegar hasta Collado Villalba. En el camino aprovechó para llamar a su abuela, compartiendo con su familia los primeros pasos de esta experiencia única. También agradeció a sus seguidores los mensajes de apoyo que ha estado recibiendo, haciendo partícipes a sus fans de este reto tan especial.

En el día 2, la ruta lo llevó hasta San Rafael, donde nuevamente el cariño de los suyos se hizo presente. Su madre y varios amigos le enviaron palabras de aliento para seguir adelante con su objetivo, animándole a no rendirse y a continuar con fuerza esta emotiva aventura de regreso a casa.

 

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Ya inmerso en los paisajes de la Sierra de Guadarrama, Enol dedicó el día 3 de su aventura a llegar hasta Anaya, ya en territorio de Castilla y León. Durante este tramo del recorrido, el cantante no solo disfrutó de la naturaleza que lo rodeaba, sino que también compartió una reflexión personal: para él, la verdadera dificultad no está en quien emprende el camino, sino en quienes se quedan atrás y deben ver a sus seres queridos desde la distancia. Una muestra más de la carga emocional que acompaña cada paso de este viaje hacia su hogar en Gijón.

 

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Día 4 del camino: primeras heridas y mucho compañerismo en la parada de Coca

En su cuarta jornada caminando de Madrid a Asturias, Enol ha tenido que enfrentarse a su primera ampolla, un recordatorio físico del esfuerzo que está implicando este reto personal. A pesar del dolor, el artista no pierde el ánimo y ha aprovechado para mostrar su agradecimiento a Dani, su amigo, compañero de equipo y de viaje, con quien comparte cada parada en esta aventura, como la de hoy en la localidad de Coca.

El recorrido, que planea completar en dos semanas, está siendo documentado día a día en sus redes sociales a través de vídeos recopilatorios en los que Enol no solo narra lo vivido, sino que también comparte reflexiones íntimas sobre lo que significa dejar atrás el hogar para perseguir un sueño.

Con esta experiencia, Enol busca dar visibilidad y voz a todas las personas que, como él, tuvieron que abandonar su tierra natal para abrirse camino en la vida profesional. Su viaje a pie desde Madrid hasta Asturias es mucho más que una caminata: es un acto simbólico de amor por sus raíces y un homenaje a todos los que cargan con la nostalgia de estar lejos de casa.